Empiezan unas nuevas navidades y con ellas todo un carrusel de celebraciones, comidas y cenas junto a nuestros seres queridos. Cada hogar es un mundo y los menús varían dependiendo de los diferentes gustos. Sin embargo, no cabe duda de que a nivel gastronómico hay una serie de productos que no pueden faltar en nuestras mesas: turrones, cava y, por supuesto, un buen jamón de bellota ibérico, la gran estrella de las fiestas más entrañables del año. Pasar la Navidad sin jamón ibérico sería como hacerlo sin el árbol, el nacimiento, los villancicos o la iluminación propia de estas fechas: algo inimaginable.

La principal razón por la que el jamón de bellota ibérico es uno de los principales protagonistas de la Navidad es su inigualable sabor, pero no es la única.

El jamón ibérico es muy saludable y no engorda.

Las navidades son unas fechas llenas de alegría y, por qué no decirlo, muy proclives a los excesos. No es extraño que nuestra “curva de la felicidad» haya aumentado considerablemente tras días de celebraciones y que nuestros indicadores de salud se hayan disparado.

Nada de esto debes temer cuando consumes jamón ibérico. Además de ser una magnífica fuente de minerales tan importantes como el hierro o el calcio, su alto contenido en polifenoles hace que actúe como un antioxidante y antiinflamatorio, siendo muy beneficioso para el sistema cardiovascular.

Y, en contra de lo que dice el refrán “todo lo bueno engorda», el jamón ibérico es muy bajo en hidratos de carbono, por lo que es ideal para mantener la línea (y durante las navidades esto es muy necesario).

El jamón de bellota es muy versátil.

Aunque durante las navidades el jamón ibérico es utilizado mayoritariamente como entrante en tablas de embutidos y canapés, lo cierto es que su versatilidad es tal que puede utilizarse en innumerables recetas, desde la mañana a la noche.

En los desayunos, una buena tostada de jamón ibérico con aceite de oliva puede ser el mejor reconstituyente para los excesos del día anterior (y, como bien sabes, los excesos son parte de estas alegres fiestas).

En cuanto a las comidas y las cenas, el jamón de bellota se convierte en un ingrediente gourmet para todo tipo de platos, enriqueciendo el sabor y el valor nutricional de exquisitas recetas como alcachofas confitadas, sopas frías de melón o las clásicas tostadas de jamón con tomate y huevo de codorniz. La presencia del jamón ibérico siempre eleva el valor culinario de cualquier plato.

Las navidades no empiezan realmente hasta que pones el árbol o nacimiento, la iluminación y el jamón de bellota ibérico Marcial Guijuelo no está presente en tu mesa. Nuestros seres queridos se merecen lo mejor y no hay un bocado más excelso para el paladar.