En nuestra finca “El Encinar de Poniente”, comienza a brotar uno de los secretos de la calidad de nuestros productos: la bellota.

Desde los orígenes siempre hemos tenido claro que la tierra, es la base de la calidad y marca, sin lugar a dudas, la diferencia.

Las 500 hectáreas de la dehesa “El Encinar de encinas” son el epicentro en el que basamos nuestra actividad. En estos momentos, empiezan a brotar las primeras bellotas de nuestras encinas, clave en el desarrollo y engorde posterior de nuestros cochinos.

Desde siempre hemos tenido claro que la apuesta por el campo y los animales son la piedra angular de todo el proceso, donde los cochinos adquieren las características necesarias para su transformación posterior en la industria.

El clima está siendo propicio para que a lo largo de las próximas semanas, las bellotas sigan desarrollándose y se conviertan en la base de la alimentación de nuestros animales.

Nuestros jamones ibéricos de bellota, proceden de cerdos ibéricos que campearán libremente en la dehesa alimentándose de pastos y bellotas, hasta su sacrificio.

Crear jamones únicos, requiere de saber hacer, calidad, paciencia y sobre todo materia prima.

Este año, comienza muy bien, ahora con cuidado y esmero y la compañía del clima adecuado, podremos seguir haciendo productos ibéricos de primer nivel[/fusion_text]